martes, 26 de junio de 2012

MATEO 23

Entonces Jesús habló a la muchedumbre y a sus discípulos, 2 diciendo: Los escribas y los fariseos se han sentado en la cátedra de Moisés. 3 De modo que haced y observad todo lo que os digan; pero no hagáis conforme a sus obras, porque ellos dicen y no hacen. 4 Atan cargas pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre las espaldas de los hombres, pero ellos ni con un dedo quieren moverlas. 5 Sino que hacen todas sus obras para ser vistos por los hombres; pues ensanchan sus filacterias y alargan los flecos de sus mantos ; 6 aman el lugar de honor en los banquetes y los primeros asientos en las sinagogas, 7 y los saludos respetuosos en las plazas y ser llamados por los hombres Rabí. 8 Pero vosotros no dejéis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro y todos vosotros sois hermanos. 9 Y no llaméis a nadie padre vuestro en la tierra, porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos. 10 Ni dejéis que os llamen preceptores; porque uno es vuestro Preceptor, Cristo. 11 Pero el mayor de vosotros será vuestro servidor. 12 Y cualquiera que se ensalce, será humillado, y cualquiera que se humille, será ensalzado.
13 Pero, ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!, porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres, pues ni vosotros entráis, ni dejáis entrar a los que están entrando. 14 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!, porque devoráis las casas de las viudas, aun cuando por pretexto hacéis largas oraciones; por eso recibiréis mayor condenación.
16 ¡Ay de vosotros, guías ciegos!, que decís: ``No es nada el que alguno jure por el templo; pero el que jura por el oro del templo, contrae obligación. 17 ¡Insensatos y ciegos!, porque ¿qué es más importante: el oro, o el templo que santificó el oro? 18 También decís: ``No es nada el que alguno jure por el altar; pero el que jura por la ofrenda que está sobre él, contrae obligación. 19 ¡Ciegos!, porque ¿qué es más importante: la ofrenda, o el altar que santifica la ofrenda? 20 Por eso, el que jura por el altar, jura por él y por todo lo que está sobre él; 21 y el que jura por el templo, jura por él y por el que en él habita; 22 y el que jura por el cielo, jura por el trono de Dios y por el que está sentado en él.
23 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!, porque pagáis el diezmo de la menta, del eneldo y del comino, y habéis descuidado los preceptos de más peso de la ley: la justicia, la misericordia y la fidelidad; y éstas son las cosas que debíais haber hecho, sin descuidar aquéllas. 24 ¡Guías ciegos, que coláis el mosquito y os tragáis el camello!
25 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!, porque limpiáis el exterior del vaso y del plato, pero por dentro están llenos de robo y de desenfreno. 26 ¡Fariseo ciego! Limpia primero lo de adentro del vaso y del plato, para que lo de afuera también quede limpio.
27 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas!, porque sois semejantes a sepulcros blanqueados, que por fuera lucen hermosos, pero por dentro están llenos de huesos de muertos y de toda inmundicia. 28 Así también vosotros, por fuera parecéis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía y de iniquidad.


De pequeña en el colegio me encantaba este pasaje del evangelio según San Mateo. Aun hoy, pasados dos mil años, describe con total certeza a un montón de personajes conocidos de todos.
Definitivamente, no hay nada nuevo bajo el sol.

Completamente dedicado entre otros, a políticos de toda condición y tendencia, que en apenas treinta años han prostituido nuestra democracia, a sus generosos amigos que regalan y consiguen, a demenciales dirigentes judiciales, a nobles de avaricia ilimitada, a aficionados a la actividad cinegética con débil densidad ósea, banqueros insaciables y demás sinvergüenzas patrios.


Con todo mi cariño y agradecimiento.

lunes, 18 de junio de 2012

MADRE, MAMÁ, MAMI

Una amiga muy querida me contó que de niña, su madre decidió volver estudiar en la universidad. Desde entonces sus tardes de parque se llenaron de libros de texto y apuntes. A ella no le hacía ninguna gracia que mientras las otras madres hablaban de cualquier cosa, la suya empollase sin descanso el próximo examen. Lo más gracioso es que buscando que su madre diera el perfil adecuado: parque, finales de los 70, señora convencional, le compraba la revista Pronto cada semana y se la bajaba ella misma. Nada de estudiar en el parque, lo que toca es hablar de Conchita Velasco y Carolina de Mónaco.
Hay tantos tipos de madre como mujeres en el mundo. Desde la padecedora ultra proteccionista, a la optimista relajada. Las hay liberales, divertidas, estrictas gobernantas, sufridoras absorbentes, cariñosas, lucidas, positivas, posesivas, equilibradas o de hacérselo mirar, en fin un infinito batiburrillo. Porque todas somos una y muchas a la vez.
A mí en el sorteo genético, me tocó alguien muy poco ortodoxo. Mis recuerdos más antiguos me remiten a una mujer que hablaba de política y arte, más ocupada en leer o charlar con sus amigas, que en sacar el blanco a las baldosas. Una madre que odiaba cocinar, o hacer la compra. A la que yo nunca sentí la necesidad de comprarle el Pronto.
El destino hizo que mi padre enfermara y me fuera a vivir con la tía Pilar. Una madre madre, de las que hacen lentejas y cocidos, cosen trajes y bordan los bocatas de tortilla de patata. Alguien con quien jugar al parchís y leer tebeos.
Mi concepto de madre se divide entre las dos. La real y la postiza.
La autentica me llevó con diez años al museo de Louvre, me habló de Leonardo y Rafael, me hizo recorrer mundo. Siempre madre o mamá nunca mami, en todos esos viajes se desprendía de su caparazón y disfrutaba, reía o jugaba. Paseamos durante años por tres continentes, era intrépida, culta y podía ser muy pero que muy divertida. Gracias a ella encontré mi destino y soy respetuosa con todo lo diferente.
La postiza era esa que cualquiera desearía ver en la función de fin de curso. Guapa aunque un poco rellenita, confortable como un sillón de orejas cuando volvía disgustada del colegio, curtida en mil batallas, la vida diaria no tenía secretos para ella. Conmigo siempre fue firme, afectuosa y paciente. Me hizo lo que soy, como veis el cielo y la tierra.
La postiza murió hace 30 años, aunque yo salude su foto cada mañana al desayunar. La he añorado tanto, tantas veces.
La real, se enfrenta mañana a un incierto veredicto médico, su camino está casi terminando. Y yo que llevo noches sin dormir preocupada por saber cómo será ese final, no alcanzo a expresar de otra manera la gratitud,el esfuerzo, las luces y las sombras.

Su huella, en definitiva.



jueves, 14 de junio de 2012

LA INEFABLE PURITA


Queridos mios, cualquier parecido con la realidad es "pura" coincidencia.


Purita tiene cara de no haber roto nunca un plato. Debe rondar los cuarenta y pocos y luce esa media melena con mechas bien cuidadas, que en estos tiempos pocas se pueden permitir.
He de confesaros que siento debilidad por ella. La veo tierna e inocente, capaz de mirar al juez y defender a su jefe el marqués de Carabás con uñas y dientes, reconociendo con aplomo que no le extrañaban las cuentas en Suiza, que para ella eran lo mismito que abrirse una en la CAM de Zaragoza con vajilla de regalo.
Purita es fiel, eso no podemos ponerlo en duda. Es una secretaria que endosa billetes de avión inexistentes a nombre de niños de 5 años como gastos de empresa, que copia dígitos bancarios de cuentas de medio mundo, pero es capaz de domesticar a siete hijos y rezar avemarías sin cesar.
Ella es madre madre y versátil, porque con el mismo aplomo consigue a un montón de amigas y parientes para que su jefe las contrate. Qué buena amiga Purita, porque además eran contratadas por no trabajar. Cotizaban a la S. Social y cobraban sin facilitar ningún servicio… Ay, yo creo que eso y las avemarías con comunión diaria, como que no casan mucho. Pero va a ser que soy una descreída y una mediocre, a la que la luz del marqués no ha tenido a bien iluminar.
Yo he trabajado como secretaria muchos años, he comprado regalos, reservado billetes, organizado eventos, pero mira tú por donde, nunca nunca, he hecho esas cosas tan feas que el juez te pregunta y rezando bastante menos, fíjate.
Porque Purita también debía machacar Internet y pasar a limpio alguno de esos informes tan finos de 10 folios, con los que el señor marques y la luz de su conocimiento, iluminaban a empresarios y administraciones publicas. Cuanta imaginación Purita y que fino todo, como no podía ser de otra manera en un hombre de su categoría y no hablemos de su esposa otra madre abnegada, trabajadora entregada y embajadora allende los mares de los auténticos valores del pueblo español. Pero yo me quedo con Purita, ella sabe lo que firma o con quien comparte titularidad en una empresa y eso en una secretaria, es algo de lo más fundamental (sobre todo si quieres que te cuadre la caja).
Disculparemos a la marquesa, el dinero a esos niveles se escapa y comprarse palacetes, pisos y garajes por doquier es algo de lo más natural, ella como madre solicita firmaba pero no leía, la plancha y las tortillas de patata siempre la esperan, como se le da tan bien reproducirse… ya se sabe que tanto niño genera una barbaridad de trabajo. Y ni te cuento cuando toca hacer la cocina a fondo, imposible leer nada, firmita y arreando.
Cuanto candor, me enternece enormemente.
El que Purita pidiera al marqués que rezara por ella es lo más bonito de todo, una avemaría y salgo del atolladero, al fin y a la postre, no hay nada raro. Ha visto robar, mentir, sacar dinero del país, cobrar fuera de España mediante testaferros, utilizando organizaciones sin ánimo de lucro que amparan a niños discapacitados, extorsionar dulcemente a empresas y administraciones públicas, recorrer los últimos paraísos fiscales de moda… todo, todo de lo más normal y elegante.
Cuida las mechas Purita, al fin y al cabo es lo más natural que tienes.

Y sobre todo sigue rezando, no pierdas la fe, seguro que con la intercesión del Señor, absuelven al marqués.
De eso hasta una descreída empobrecida como yo, está completamente convencida.
Todo claro está, presuntamente, como en el “Sálvame”.